La vida útil de una manguera puede verse afectada por falta de un adecuado proceso de limpieza y esterilización. Por un lado, puede llegar a afectar las propiedades mecánicas y el comportamiento de los materiales utilizados; y por otro, al generar un efecto de envejecimiento que acelera su deterioro. Por esta razón, Representaciones Industriales RDV le recomienda 2 métodos habituales de limpieza y esterilización que puede implementar con regularidad (en lo posible antes de cada uso) para evitar la formación de microorganismos contaminantes que dañen la parte interna del tubo.
Tabla de contenidos
1. Método de limpieza in situ CIP (cleaning in place) que utiliza diferentes soluciones químicas y diferentes concentraciones:
- Soluciones básicas como la soda cáustica que se usa para la remoción de grasa y la parte proteica.
- Soluciones ácidas como el ácido fosfórico para eliminar depósitos de minerales
- Ácidos oxidantes como el ácido nítrico peracético o el peróxido de hidrógeno para eliminar la formación de bacterias.
2. Método de esterilización in situ SIP (sterilization in place) que utiliza vapor a altas temperaturas, impidiendo el crecimiento bacteriano
En la actualidad son considerados los mejores métodos de limpieza, puesto que garantizan la seguridad y eficiencia del proceso, evitando la contaminación de los productos con sustancias contraproducentes para la salud. Aun así, resulta importante considerar que las dos opciones para la limpieza y desinfección de las mangueras pueden causar un deterioro considerable con el paso del tiempo, de ahí la importancia de hacer una buena elección de los materiales al momento de comprarlas, ya que esto determinará en gran parte su resistencia.
Ahora que ya conoce estas dos opciones de limpieza y desinfección de mangueras industriales, lo invitamos a visitar nuestro catálogo de referencias para la industria farmacéutica y de alimentos en: https://rdv.com.co/categoria-mangueras/
