Para garantizar el debido proceso en la producción de medicamentos, la industria farmacéutica debe cumplir con algunos requerimientos mínimos en la instrumentación que se utiliza dentro del desarrollo de estos. Sin embargo, no todas las herramientas que se utilizan cuentan con la rigurosidad que exige la FDA (Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos) y los estándares sanitarios dados por la EHEDG (European Hygienic Engineering & Design Group) para preservar la pureza y descontaminación de los productos.